martes, 16 de junio de 2009

LA POLICIA LOCAL

Hoy (16 de junio a las 13.30 aprox) he presenciado un hecho insólito y nada sorprendente dados los antecendentes de la policía local de Viladecans.

En la rotonda del IES Torreroja, una mujer mayor con una muleta se disponía a cruzarla sin acceder por el paso de peatones y jugándose la vida por donde está la entrada a las obras del colegio Martí i Pol (que por cierto no tiene ninguna protección ni paso para los peatones). Los coches pasaban y la mujer con paso débil se detenía y dejaba pasar los coches, hasta que un conductor se bajó y ayudó a la mujer a pasar; los conductores que le seguían sin ninguna prisa observaban la acción y no se inquietaban ni utilizaban el claxón.

Pero en esto, que el guardia situado en el IES Torreroja para dirigir el tráfico que sube por la calle que advierte la maniobra del "compasivo" conductor y se dirije a éste con aires de sheriff y vociferando que eso no lo puede hacer. El conductor de buenas maneras le advierte que sólo estaba ayudando a que a esa mujer no la atropellaran, pero el policía en tono amenazante y chulesco le indica al conductor que se aparte a un lado porque lo va a multar por su "temeraria" acción.

Algún otro conductor viendo la acción del policía, le recriminaron  su actitud, pero éste sin inmutarse, siguió emitiendo voces a todo el mundo, aunque al final acabó recapacitando y dejando ir a todo el mundo.

Luego, observé como se dirigió hacia la anciana y creo que le indicaba que "mala, mala, mala, eso no se puede hacer, o la meteré en el calabozo"

Bueno, ésta es la policía que tenemos, la que impide que ciudadanos honrados intenten ayudar a una mujer a que no la atropellen, pero luego permiten que los niñatos nos llenen de ruido nuestras calles con sus motos, permiten que los coches aparquen en cualquier sitio, o no acuden cuando se les llama, o te insultan por teléfono.